Monasterio de Obarra

El monasterio de Obarra se encuentra en el Valle del Isábena, en el municipio de Beranuy y muy cercano a la Catedral de Roda de Isábena. El Monasterio existía al menos desde el siglo IX, siendo su primera mención documental del año 871. Fue destruido en la razzia de Abd-al-Malik, que también destruyó la villa y catedral de Roda. En 1076 el monasterio, que había atravesado una época de decadencia tras la muerte del abad Galindo (1025-1030), es reducido a la categoría de priorato y sometido al monasterio de San Victorián por Sancho Ramírez. A partir de este momento, y salvo un intervalo de relativa pujanza en el siglo XVI, jugará un papel secundario en la historia ribagorzana, muy lejos del protagonismo que había tenido entre los siglos IX y XI.

Su principal edificio es la iglesia de Santa María, de estilo románico lombardo, cuya estructura se dispone en planta basilical dividida en tres naves con ábside central decorado con arcos. En su interior se encuentra la imagen de la Virgen de Obarra. En la zona superior se ubica el palacio abacial y al sur la ermita de San Pablo.

Existía en el monasterio un puente medieval sobre el Isábena que daba acceso a la zona del monasterio, pero fue destruido por una crecida del río en 1964, hoy reconstruido junto a un edificio popular utilizado para actividades juveniles.

El Monasterio fue declarado Bien de Interés Cultural en 1931. Se dice que la arquitectura del edificio permite la observación astronómica y ofrece un calendario cristiano perpetuo por la entrada de la luz de la luna por la ventana central del ábside, en el segundo plenilunio de otoño.