El congosto de Obarra es un sobrecogedor y estrecho desfiladero que discurre entre los municipios de Veracruz y Laspaúles con grandes paredes verticales que guían al río Isábena.
La roca caliza, desgastada por el paso del agua a lo largo de los años, ha ido modelando un paisaje curioso en diversos tramos donde la estrechez del cauce logra límites inimaginables, que difícilmente dejan pasar los rayos de sol hasta el fondo, donde abundan pequeñas pozas, que propician cascadas de diferentes tamaños, configurando un paisaje de una gran belleza paisajística.
El Congosto de Obarra es también un buen lugar para observar aves como el roquero rojo o las chovas. En los bosques cercanos de hayas, robles y pinos se pueden avistar diversas aves. Se trata de una zona de especial interés debido a su extraordinario paisaje en el que se conjugan agua, roca, vegetación y fauna.
Lo podemos recorrer por la carretera que dirige al monasterio de Obarra, dirección Bonansa.